DISCURSO DE GRADUACIÓN:
( Por José Luis Orbezo)
Posiblemente algunos de ustedes se preguntaran que estoy haciendo aquí arriba, y para ser sincero yo también me lo pregunte ayer por la tarde, porque mientras estaba en clase, Tai fue a hablar conmigo y me ofrecio en nombre de la oficina de Relaciones Internacionales hablar para todos ustedes. No les voy a mentir, al principio me dio pánico no saber que decirles, pero un momento despues pense en que esta era la mejor oportunidad para agradecer y recordar a todas aquellas personas que de una u otra forma han hecho que cada uno de nosotros, hoy, finalicemos con éxito una de las mejores etapas de nuestra vida, si no es que la mejor.
Es un poco dificil hablar para tantas personas que han vivido la misma experiencia de forma tan distinta, por que sin lugar a duda cada quien ha aprovechado este tiempo en España de una manera unica e irrepetible.
Para mí el dirigirme a ustedes supone un gran esfuerzo porque yo no les puedo decir nada que no hayan vivido, que no se hayan propuesto y que no hayan pensado durante este intercambio. Empezare por platicarles un poco acerca de mi propio intercambio porque creo que lo que yo les pueda contar es muy similar a sus propias experiencias.
Soy mexicano y pertenezco a la primera generación de la Universidad Anáhuac de Puebla, mi estado natal, como todo inicio, y el nuestro no es la escepción, ha sido dificil, nos hemos topado con muchas cosas que al ser nuevos no sabemos hacer o al menos no sabemos hacer del todo bien y muchas veces antes de lograr una mejora alcanzamos fracasos que llegan a pensarse eternos.
Creo que algunos de mis compañeros aquí presentes, también originarios de Puebla, no me dejaran mentir. Muchos entramos a la Anáhuac Puebla por que nos ofrecieron una doble titulación en nuesta Licenciatura, pero en ese momento ni siquiera teníamos edificios, solo nos llamó la ilusión de viajar a Europa y lograr un titulo aquí, sin saber siquiera lo que esto significaba, solo era la ilusión de estudiar fuera, de divertirse y alejarnos de nuestra casa por un tiempo.
Durante los primeros años de la licenciatura los estudios no se complicaron mucho y por la experiencia en el trabajo y las practicas, llegue a saber lo relevante que puede ser alcanzar un grado internacional de educación superior, pero aún así la idea de alejarme de la rutina y de las reglas de mis padres, siempre me sonaba más interesante.
Como no hay fecha que no llegue, ni plazo que no se cumpla, hace 8 meses llegue a la Universidad Francisco de Vitoria, con la ilusión de viajar, conocer, divertirme y si me quedaba tiempo, estudiar un poco.
Hoy estando en la recta final puedo decir que no ha sido nada facil y que en muchos casos hemos estudiado más de lo que habíamos estudiado hasta antes de llegar aquí, y aunque todavia nos queda un salto que dar, me refiero a esos magnificos examenes en los que muchas veces sentimos que el profesor hizo su mejor esfuerzo para hacerlo lo más dificil que se podia, de una u otra forma esta etapa esta por concluir y puedo decirles que al estar aquí me he topado con muchas nuevas lecciones y sentimientos encontrados, por ejemplo:
· Descubri que lleva mucho tiempo hacer amigos importantes y solo un error destruir amistades pasadas.
· Siempre había querido vivir solo y en Madrid descubri que tenia que cocinar, lavar, planchar y hacer todo tipo de limpieza, hoy, valoro todas las veces que mi madre hizo esas cosas por mí.
· Creía que mezclar trabajo, estudio y tiempo libre era cosa facil y hoy, que pocas veces puedo darme tiempo para mi, valoro todas las veces que mi padre hizo lo imposible para pasar un rato junto a la familia,
· Y como lo dije antes quería alejarme de las reglas de mis padres y hoy sin embargo me gustaría que estuvieran aquí sentados.
No tengo mucho más que decir, por que como lo dije antes todos vivimos cosas semejantes, y espero que mis palabras los hayan hecho recordar lo que cada uno de ustedes vivió. Solo quiero, sin ser una estrella del futbol, dejarles una metafora que un amigo que conocí aquí me dijo en uno de esos muchos momentos dificiles y que despues de pensarlo mucho, comparto ampliamente, espero no aburrir a los que ya la han escuchado:
La felicidad eterna NO existe.
Muchos de ustedes tal vez no esten de acuerdo, pero para explicarme quiero que piensen primero en la felicidad como una pelota de futbol, y en los humanos como en los jugadores de un partido, que es la vida.
Despues tenemos que imaginarnos que estamos jugando ese partido y siempre TODOS queremos tener la pelota durante el mayor tiempo posible y también hacer nuestra mejor jugada.
Pero siempre llega el momento en el que la pelota es nuestra y aunque en ese momento seamos plenamente felices, tenemos que dar el pase antes de que llegue otra persona a quitartela. Y así es a felicidad luchamos por cosas que al alcanzarlas nos dan una satisfacción temporal hasta que empezamos a desear algo más y tenemos que volver a buscarla en un ciclo infinito.
Por lo tanto, recordemos siempre que la felicidad es momentanea y la naturaleza del hombre le hace querer siempre más, hoy que somos felices por haber terminado esta etapa, los invito a disfrutar el momento en el que tenemos la pelota y a prepararnos para dar el pase que nos dejará con ganas de luchar por ella otravez. Pongamos los ojos en una nueva meta y no dejemos de pelear hasta alcanzarla y en el momento que lo hayamos logrado volvamos a empezar.
Para terminar quiero a nombre de todos los alumnos aquí presentes dar las gracias a los Directivos, a la Universidad Francisco de Vitoria y a la Legión de Cristo, por abrirnos las puertas a esta oportunidad y por la forma tan especial con la que lo ha hecho a lo largo de estos meses.
Agradecer de todo corazón a los profesores que en el día a día luchan por transmitirnos sus conocimientos y experiencias para hacer de nosotros mejores seres humanos, mejores profesionistas y mejores ciudadanos de cada una de nuestras naciones.
Tambien quiero agradecer de forma muy especial a Daniela, Taissa, Belen, Isabel, Barbara, Alejandra, Valery, Angela, Beatriz y Fernando, el equipo de Relaciones Internacionales que gracias a su trabajo, nos ayudaron a solucionar hasta el más sencillo problema y platicaron con cada uno de nosotros ofreciendonos siempre un consejo, una sonrisa, un abrazo y por que no a veces hasta un regaño en el momento que lo necesitabamos. Gracias por enseñarnos sus ciudades, su arte, y su cultura, por escucharnos y buscar lo mejor para nosotros y gracias por hacernos sentir parte de la Universidad Francisco de Vitoria y no solo unos estudiantes de visita.
En fin hay tantas cosas que pasamos juntos durante este tiempo de intercambio que la mejor forma de resumir lo mucho que apreciamos todo el trabajo que realizan dentro de la Universidad para recibirnos es diciendoles, gracias, muchas gracias por todo.
Finalmente quiero despedirme recordandoles a todos, que esta es solo una etapa más, nos queda mucho por delante y tenemos que luchar todos los días por alcanzar nuestras propias metas, ya que nadie lo hará por nosotros. Recuerden que en esa lucha tenemos que dejar atrás los problemas y obstaculos que la vida ponga en el camino, sin importar que tan dificiles sean. Y les pido a todos que disfruten aquellos momentos en los que la felicidad los acompañe, y siempre, siempre traten de vencer al mal con el bien.
Muchas gracias y mucha suerte.
